Si un gramático foráneo estudiara el castellano basándose exclusivamente en sus hablantes de la calle, sus conclusiones serían las siguientes:
En el idioma español no existe el modo superlativo regular, sino que se construye con locuciones que expresan el grado máximo del calificativo:
- Bueno, muy bueno, de puta madre.
- Rápido, muy rápido, cagando leches.
- Valiente, muy valiente, con dos cojones.
- Lejos, muy lejos, a tomar por culo.
De Almudena (enchufa2)
1 comentario:
brillante .... brillante ... destornillante ..... ça, tout .....
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