viernes, marzo 13, 2009

Ropa limpia

Me fuí a rebuscar en el grupo en el que lo escribí (al año 2004.. cómo pasa el tiempo!). Que como bien decía Carmen en su casa, algo se puede hacer, aunque sea un granito de arena, para mejorar un poco las cosas, y si no... para no empeorarlas.

En realidad de lo que hablábamos era de la felicidad, bienestar (con uno mismo) y de que si no se le da permiso a lo externo para molestarte, la felicidad está dentro de uno mismo.
No comento más eso aquí, porque ya lo hice allí.
Solo pego el mensaje, tal como lo escribí en su día, porque cuando leí la frase de marras, me pregunté cómo se le podría aplicar a aquellas mujeres, o a tanta gente en situaciones parecidas o incluso peores....

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Creo que éste va a ser mi panel favorito desde ahora. Porque yo, como hobbie, practico el intentar mejorarlo todo. Lo que tengo al lado o muy cerca, pero tambien lo que me queda muy lejos. No hace falta pertenecer a ninguna ONG para hacer algo positivo por los demás, pero te da una visión más completa de donde están los problemas y de lo que cada uno puede hacer, aunque sea poco para, si no arreglar, por lo menos no seguir empeorandolo todo.

Yo, puedo hablar y hablo, de lo que sé y conozco, de lo que he vivido en primera persona, sobre un asunto del que muchos hablan, opinando sobre todo por la idea que se hacen de las cosas que leen y que otros han escrito.

Hace unos quince años, buscando trabajo después de un divorcio que me dejó sin ganas de nada más que liarme a trabajar todas las horas del mundo para no estar autocompadeciendome todo el dí­a y, de paso, conseguir una autonomí­a que hasta entonces no necesitaba, me presenté en una empresa de confección, que puso un anuncio en el periodico, buscando inspectoras de calidad, monitoras de talleres y no sé cuantas cosas más.

La empresa se llama MAYORAL y tení­an unos cuantos talleres de confección por algunos pueblos de Málaga y Cadiz.

Yo no solo no era nada de lo que pedía el anuncio, sino que ni siquiera sabía qué tipo de trabajo era ese. No envié ningún curriculum por lo mismo.

Me fuí directamente a presentarme porque el sueldo era de 200.000 pesetas, que en aquel entonces, incluso aquí, merecía la pena intentar conseguir el empleo.

No engañé a nadie, de entrada les dije que no tenía ni idea de confección, ni de calidad, ni de talleres ni maquinaria, pero que fuera lo que fuera, si me daban la formación necesaria, estaba dispuesta a trabajar para ser la mejor en el menor tiempo posible. Al día siguiente estaba haciendo las maletas para ir a Madrid y hacer un curso de tres meses. Monitora, visitadora e inspectora de calidad.

Ganaba bastante más de las 200.000 prometidas, porque no paraba de viajar y lo tenía todo pagado y por cada viaje te pagaban un plus. Durante dos años todo fué perfecto, aunque ya estaba frenando un poco el ritmo, pero creo que hice más km. que muchos camioneros!

Después de eso, fueron poco a poco cerrando talleres (ahora en Málaga no queda ni uno) y abriendolos en Marruecos, en la India, en Indonesia y en China. Marruecos es un país maravilloso, precioso, que a mí­ me fascina, tanto como su cultura y su gente. Desde que fuí­ por trabajo y no por placer, no he vuelto a pisarlo porque ya no podría disfrutar de todo lo que el turista tiene a su alcance sin saber lo que se esconde detrás.

Cuando fuí­ a la India enfermé de un montón de cosas que me dejaron sin fuerzas para una larga temporada y el último viaje que hice, fué a Bangladesh. En Dhaka acabaron con las ganas que tení­a de trabajar. Volví enferma, del cuerpo y del alma, me despedí de la empresa y casi un año me costó tener fuerzas para seguir con mi vida.

Es muy largo de contar y son muchas cosas, pero intentaré ser muy breve.

Llegabas a un taller sin avisar, y de toda la confección terminada y preparada para embalar, tení­as que coger una prenda y revisar la calidad de la confección.

El taller apestaba, no tení­a ventilación ninguna, la luz, insuficiente, vená­a de unas lamparas con una bombilla pelada que colgaban de un largo cordón desde el techo, habí­a unas 60 mujeres cada una con su maquina directamente en el suelo sobre unos tapetes mugrientos.

Le dije al jefe del taller que me trajera una camisa de uno de los montones allí  apilados y después de revisarla le mostré un puño muy mal rematado para que lo desechara. El la miró, buscó la etiquetita con el número de la mujer que la habí­a cosido  y la llamó. Ella se levantó y vino hacia nosotros con la cabeza gacha hasta situarse delante de el jefe, que sin mediar palabra alguna, cogió un bate de beisbol que tení­a apoyado en la mesa, lo levantó y le asestó tal golpe en la cabeza, que la mujer cayó desplomada a mis piés, como un toro cuando lo rematan con la puntilla. Nunca olvidaré el ruido de su craneo al romperse, el charco de sangre que apareció de pronto, ni el silencio que se hizo durante apenas dos o tres segundos, porque enseguida siguieron todas como si nada hubiera pasado. 

¿ Qué se puede hacer? Pues yo, por lo menos, no ser un engranaje más de esa maquina aniquiladora de personas, aunque supongo que alguna otra estará en estos momentos mirando para otro lado para ganar un sueldo que supone lo que varios talleres como aquel ganan en total en un año entero de trabajar de sol a sol.

Igual que todos miran para otro lado y no quieren enterarse de que la mayoría de las marcas están haciendo lo mismo.

Cada uno decidirá lo que hace y lo que compra, pero espero que después de leer algunas cosas, se lo piensen un poco y visiten algunos sitios de internet.

Si la gente que trabaja en ONGs lo hace para salir guapa en la foto, como dicen algunos, estoy segura de que a los que beneficia les importa un bledo y ya quisieran ellos que muchos más trabajaran en la medida de sus posibilidades por ayudarles, aunque solo sea por salir guapos en la foto!

Este es muy interesante, por si quieren saber un poco más.

ROPA LIMPIA

Angie

28 comentarios:

Edwin Montero dijo...

Me gusta tu estilo literario Owángela. Ameno, sin mucho rebuscamiento y al grano pero a riesgo de hacer desparecer el buen escribir ¿Cuánto sería más o menos 200 mil pesetas que supongo mensuales? Y sí, de mi parte quiero saber un poco más. :)

Angie E.G. dijo...

Pues serían hoy día 1.200 euros y hablo de hace 20 años!

La verdad es que estilo literario no tiene ninguno, si acaso está escrito con rabia, emoción y mucha amargura. Fué la primera vez (y la única) que conseguí encontrar palabras para contarlo. Hoy intenté añadir algo, reescribir algún pasaje... pero me sigue siendo imposible.

Gracias, Edwin.

Don´t worried.. ..be happy! dijo...

Me ha gustado,que importa el estilo sino la esencia,mañana digo mas que yo a las 22 ceno como un clavo
Me ha impactado pensar en la escena...
Bueno,mañana mas que me ha gustado mucho el escrito coño.

Edwin Montero dijo...

Bueno Owángela, realmente impactante el asunto ese de la violenta respuesta (je je je me recuerda que alguien por allá dice que el castigo es algo aplicable pa qué aprenda), casi que respuesta animal del señor que golpeó, ¿O era en sí el animal? a la mujer. ¿Sólo por tu observación? Carambas si ahi a la vuelta está aun lleno de trogloditas.
Sé que no viene al caso pero cuando me pregunto acerca de la esclavitud ¿quién realmente la propició? El esclavista o el esclavo y viendo que hay pueblos que se sublevan, no puedo dejar de pensar en que muchas veces la esclavitud se debe a la sumisión del esclavo. Incapaz de verse en libertad y de disfrutar de la igualdad. No sabría a ciencia cierta qué pesa más.
¿Continuarás?

Angie E.G. dijo...

Tienes mucha razón, sabes?
Después de aquello, luego de pasar un tiempo, conocer gente que trabaja contra ese tipo de "negocio" que se ha extendido como la pólvora por la aldea global, me uní a ellos, denunciamos los talleres (de Marruecos, de la India y sobre todo ese de Bangladesh) la empresa había despedido ya a aquel matarife, claro, y decía que no sabían nada de todo aquello...
Pero lo peor de todo fué que los que se personaron allí para recoger datos, hablar con las mujeres, fueron casi linchados, por miedo de ellos a perder el trabajo, a que se fuera de allí la empresa, que era lo único que tenían para sobrevivir malamente. Éramos sus enemigos!

La verdad, no sé qué solución puede tener todo esto, porque se trata de gente al borde de la desesperación que hace cualquier cosa por un puñado de arroz.
Incluso creo que si el jefe no le machaca la cabeza, habrían sido capaces de hacerlo sus propias compañeras, por poner en peligro ese puñado de arroz.

Allí no se puede hacer nada, lo que sea tiene que salir de aquí.

Continuaré?
Pues no sé, Edwin. Ni sé si seguiré aquí mañana. Supongo que algo sabrás de lo que pasa por detrás de este escenario del Multiply (que no es más que lo mismo que el Msn), y hay momentos en los que me siento tan, pero tan cansada de historias raras, de que me tomen por lo que no soy, de que se me encasille en un personaje de cuento salido de una mente enferma... que me compensa poco.

El mundo es muy raro, porque lo hacemos así los humanos.
Pero qué digo?
Me voy a leer unas cuantas veces la frase del día, hasta que me convenza yo misma de que lo externo no tiene porqué influir en mí para nada. Que la felicidad la tengo yo dentro, joder! A por ella!!!

Perdona, Ed, m'has pillao en mal momento. Mañana sigo en serio. Si sigo aquí.

pei ... dijo...

A ver, angela, quizas me meto donde no me llaman, pero lo que yo he leido es que no debemos depender de lo externo, no que no nos pueda influir.

Angie E.G. dijo...

Igual da, Pei.
A menos que depender de lo externo lo entiendas tú como depender de lo material.
No depender de lo externo... por decisión propia?
Sí. Queda precioso.

Sin irme ya a Bangladesh ni poner a esas pobres mujeres de ejemplo, yo misma.
Lo externo mío, en estos momentos, te prometo que es desolador. No te lo voy a contar en detalles, pero créeme. Simplemente con decirte que tengo a dos pasos a mi madre enferma de Alzheimer, cada día peor, sin poder perderla de vista ni un mínuto... sería suficiente, pero te aseguro (tú créeme) que hay bastante más que eso.
Pero como la felicidad o el bienestar no es más que un estado de ánimo y yo decido cuando quiera que nada va a influir en mí para que yo lo alcance... pues en eso estoy, jejeje.
Mañana es sábado y no hay centro de día. Pasado es domingo y tampoco. Tendré suerte si esta noche duermo tres horas seguidas de un tirón antes de que me tenga que levantar por cualquier chuminá que sele cruce por la cabeza. Puede que se haya quitado el pañal, lo haya llenado todo de mierda y haya empapado hasta el edredón... pero no va a influir en mí, qué coño!

Vale, que como decía Carmen, eso se refiere a gente normal, en situación normal... pero claro, eso se avisa antes de la frase: sólo válido si eres normal, tienes de todo, y aún así no eres feliz. O no?

Carmen /Nath dijo...

A ver si puedo llegar a ti.
Cuando una persona no depende para ser feliz de lo que está fuera de ella, se convierte en una persona más útil para los demás, porque pierde el miedo a lo que los demás piensen o digan. Además, ser feliz en función del exterior es convertirse en una marioneta de todo y todos los que nos rodean. No se puede ser uno mismo sin darle valor a lo que somos, asumirlo y aprender a verlo con la misma consideración que podemos darle a los demás. Por eso se es feliz desde dentro, como se es alegre desde dentro. Nuestras emociones han de depender de nosotros mismos.
Eso no significa que no sintamos tristeza, dolor, o frustración por lo ajeno, pero todas esas emociones no se quedarán ahí. La persona que se sabe a sí misma, es mucho más eficaz y rauda en prestar la ayuda necesaria, con toda naturalidad y despreciando cualquier amago de agradecimiento. Porque no precisa de eso para hacer esto o aquello. Simplemente lo hace y punto... forma parte de su cualidad de bienestar interior.
No soy capaz de explicártelo mejor, pero los ejemplos que has puesto no tienen relación con lo que yo he dicho.

pei ... dijo...

Depender de lo externo, si, de lo material, o de lo profesional, o de lo sentimental... depender, por poner un ejemplo, de tu pareja para poder ser feliz. Yo entiendo que no, que uno ha de ser feliz por si mismo y compartir esa felicidad con su pareja. No se si te sirve el ejemplo. No quiero darle mas vueltas al tema, que todos llevamos nuestra mochila a la espalda, y de nosotros va a depender llevarla con mas o menos animosidad.

Carmen /Nath dijo...

De lo que tu hablas, pei, es de amarse a uno mismo a través de otro, en vez de amarse primero a sí misma. Porque el que no tiene amor no puede darlo ni compartirlo.

Angie E.G. dijo...

Jajaja! Como casi siempre, cada uno habla de lo suyo y el lenguaje solo sirve para enredar. Podemos estar años hablando de qué es la felicidad y en qué consiste.
A menos que alguien aquí lo tenga tan claro que ya, por fín, no haya que seguir buscándole explicación. Nos darán el Nobel?

(pido, por favor, que no se le ocurra a nadie pegar alguna inspirada cita de Bucay... que tengo el estómago perjudicao y no sé si llegaré al baño a tiempo de soltar la vomitera!)

Angie E.G. dijo...

Carmen: te aseguro que en ningún momento he llegado a pensar en lo que los demás piensen. Jajajaja! Joer! Se vé que no me conoces.
Tampoco creo que a ninguno de mis ejemplos se le pase por la cabeza.

Evidentemente hablamos de cosas distintas y lo sé desde el principio. Es solo que cualquier frase brillante, epatante y que a unos les cuadre a la perfección, no es más que un montón de palabras vacías de sentido para otros, por mucho que se la quiera argumentar.

Odio las: frases del día.

No te lo tomes a mal, Carmelilla, que son cosas mías. Otro "odio" más que apuntar en mi lista.

Voy a empezar a ir desgranando mis "adoro", que también los hay, no te vayas a creer. A montones, muchos más que los "odio".

Besitos.

Angie E.G. dijo...

Adoro a la gente que sabe gastar algo de su tiempo en intentar hacerse entender y llegar al otro.

Ea! El primero y os lo dedico a todos!

pei ... dijo...

Sin embargo, frases no, pero si soy muy refranera. Pienso que los refranes encierran mucha sabiduria.
Carmen, si que me referia a eso, pero era solo un ejemplo, y pienso que extrapolable a todo lo demas.

Carmen /Nath dijo...

Perdona, las frases del día, en este caso, son de mi cosecha.
Lo que he intentado explicarte no tiene nada que ver contigo ¿Por qué has decidido personalizar? Empiezo diciendo: A ver si puedo llegar a ti.
No quiero agobiarte. Pero no se como decirte las cosas, estoy segura que es por que hoy estoy muy espesita.
Agarimos, miña reina.

Angie E.G. dijo...

Che! Frena! Que cuando digo que odio las frases del día no me refiero a "tus" frases del día, sino a eso que puedes leer en blogs, calendarios, periódicos, etc.. y que se titula así: frase del día. (aunque claro, las tuyas también entran, jejeje)

Es el concepto en sí, mesplico?

(oye, agarimos qué son? que no he tenido tiempo todavía de averiguarlo, hija)

Carmen /Nath dijo...

En fin, no soy una profesional de la felicidad, Ángela. Mis palabras son las que son y pueden ser tenidas en cuenta o no, entendidas o no, despreciadas o apreciadas... todo es cuestión del momento y el lugar... y, posiblemente, de la situación de quien las lee.
Quizá mañana esté más ágil

Carmen /Nath dijo...

Agarimos: Cariños.
Bicos: Besos
Es gallego.

Angie E.G. dijo...

Pos muchos bicos agarimosos.

Carmen /Nath dijo...

Pero a que si que entiendes Joía niña...

Angie E.G. dijo...

Tenía una amiga gallega que me enviaba ñañaras (según ella es cogerte el mentón y moverte la cabeza de cariñito, me encantaba. Adoro las ñañaras!)

Pos claro que te entiendo. Igual que tú a mí, no te digo!

Carmen /Nath dijo...

Buenas noches, buena gente.

Edwin Montero dijo...

Bueno Owángela de mi parte te exhorto a que continués el relato. Hay mucho aun qué lograr y, aunque así no se piense ni perciba, tu voz no sólo es de alerta sino que necesaria en estos lares.
¿La felicidad? Tema para otro día. Que nos lo pueda decir la mujer con su cráneo despedazado.

Don´t worried.. ..be happy! dijo...

Vuelto a leer saco conclusion en cuatro palabras:
Explotacion
Humillacion
Produccion
Lucro....o sea,capitalismo puro y duro,beneficios,ganancias,sobreproduccion como y a costa de lo que sea
Ya se que no digo nada nuevo,pero se me ocurre imaginar si rompiesemos algun eslabon de la cadena...(que de hecho y si no se remedia alguno ha de alterarse por narices,vista la que esta cayendo)
Buenas y primaverales noches.

Carmen /Nath dijo...

Respecto a tu escrito, recuerdo Intelhorce, y esa si que es una larga historia. Y son esos mismos impresentables quienes dicen ser y llamarse emprendedores... yo sigo llamándoles especuladores, en su sentido más peyorativo. Por qué, no sólo explotan a los trabajadores, sino que se atreven a especular con su salud, su hambre y su vida.
¿Hay diferencia con los dueños de minas en la Inglaterra de principios del XIX o EE.UU. del XX? No, no hay grandes cambios cuando rebajar los costes y maximizar ganancias es el proyecto.
Por cierto, no conozco ni a un sólo empresario, pero si a muchos especuladores que cuando rascas no hacen otra cosa que justificarse, y encima van de victimas y pretenden que des como aceptables sus tropelías y patente de "legitimidad" a sus actividades.

Ana * dijo...

Angela durisimo relato,real de la vida misma....creo que sin duda deja huella en uno,asi son las situaciones en nuestro tiempo y sin ir lejos podemos tenerlas parecidas a nuestro alrededor.
animo en tu situacion personal no hay otra amiga, es facil decir pero para quien lo vive es duro,una situacion de impotencia en muchas ocasiones,eres fuerte se denota y auque hay ratos para todo...mucho animo,te mando besitos wapa

Isabel Drake (temible pirata) dijo...

Angy, solo por esta exposición ha valido la pena conocerte.
Un abrazo.
Muy muy grande.

MariCarmen ..................... dijo...

Eres de una sola pieza...