No tengo apenas tiempo para nada, salvo levantándome a las 6 de la mañana, cuando todavía nadie puede impedirme leer o entrar en internet, y eso es lo que hago. Por eso tampoco comento apenas sobre lo vuestro o los comentarios que haceis a mis entradas.
Lo digo, pa que sepais que me encanta que comenteis y que cuando tengo un ratito me encanta leeros.
Es que estoy de mudanza y obras (hace falta explicar más?).
Pues esto sí lo comento un poco antes de pegarlo, porque me ha recordado mucho a una entrada que puso Elo hace ya tiempo, sobre ese uso, abuso o mal uso de ciertas palabras que acaban no diciendo nada o quizás todo lo contrario de lo que significan. En este caso, incluso se inventa una palabra inexistente para sustituir a otra que incomoda...
No tiene desperdicio : )
Es de Enchufa2
PALABRAS COMO PUTAS
Hay palabras meretrices, en el peor de los sentidos. Palabras dispuestas a venderse al mejor de los postores, palabras que engañan a quien las oye y a quien las usa, dejándole un distintivo aliento a mierda en la boca. Los periodistas y los publicistas saben mucho del tema. Saben que suena mejor (y, ante todo, menos agitadora) la solidaridad que la justicia. Saben que nos hace sentir mejor la condescendiente tolerancia que el respeto. Saben que las mujeres de la tele no cagan: se liberan, no menstruan: les gusta ser mujer y, por supuesto, no tienen pelo: tienen cabello.
Los periodistas y los publicistas saben mucho del tema, pero —como el que no corre, vuela— otros vendedores profesionales de patrañas han decidido ponerse al día. Los señores curas quieren convencernos de que el Estado debe buscar la laicidad, no laicismo. Y la diferencia no es sutil, sobre todo porque el término que ellos acuñan, laicidad, no existe. Si lo buscas en el diccionario, la RAE te sugiere que busques “laxidad” o “laxitud”, a saber, cualidad de lo laxo: flojo, relajado, poco sano. A lo mejor es eso lo que buscan: un laicismo relajado, destilado… tanto como el de hace 50 años, más o menos.
Llama la atención, sin embargo, la calidad de esta campaña de manipulación. Como decía otro genio de la propaganda llamado Joseph Goebbles: “Miente, miente, miente que algo quedará”. Durante los últimos años, los curas no han perdido ocasión de colocar cada término en su contexto. Gracias a ellos, hoy sabemos que el laicismo es intransigente, radical, filofascista (manda huevos) y violento. La laicidad, en cambio, es sana, positiva, inclusiva… En internet también han puesto su granito de arena: si a alguien se le ocurre buscar “laicismo, laicidad” en Google, los resultados dan miedo, y es que casi todas las fuentes tienen un solo sesgo ideológico. La razón es sencilla: quienes necesitan establecer esa diferencia lo hacen para poder demonizar el legítimo laicismo, sin parecer demasiado retrógados. De este modo, laicismo —doctrina que defiende la independencia del hombre o de la sociedad, y más particularmente del Estado, respecto de cualquier organización o confesión religiosa— queda convertido en “hostilidad o indeferencia contra la religión”. Vaya, lo que hasta ayer venía siendo anticlericalismo.
La conveniente ambigüedad está perfectamente calculada. El cambio de significados de las palabras no es casual y tiene un nombre que todos conocemos: manipulación. Lo que sucede es que estos señores no quieren renunciar a sus privilegios y, visto lo visto, tampoco parece que nadie vaya a impedirlo.
Fantástico artículo. Si es que el diccionario sigue siendo el mejor libro que uno puede leer. Para bien o para mal, claro, eso ya depende de cada uno.
ResponderEliminar...laxante (natural en este caso, intrínseco)
ResponderEliminarPozí.
ResponderEliminarEs como cuando equiparan "feminismo" a "machismo". Y lo derivan: "feminazi".
Sssstupendo, que diría Forges.
Ayyyyyyy que esta noticia viene al pelooooo:
ResponderEliminarhttp://www.lavanguardia.es/cultura/noticias/20100910/54001872311/%C2%ABcesar%C2%BB-no-es-sinonimo-de-%C2%ABdestituir%C2%BB.html
en el fondo cuando habla de laxitud = flojera, tb se pueden referir a laxante, o sea nos estan amenazando con que cuando regresen al totalitarismo religioso, nos van a dar un laxante que nos vamos a cagar.
ResponderEliminarun beso y una flor, nino
Cesar no es sinónimo de destituir, dice la nticia que trae Elo. Pero es que destituir es muy fuerte y políticamente incorrecto, y se trata de ser políticamente suave y correcto utilizando cuantos eufeminsmos sean necesarios. No se: "Te destituyo" suena como a fuerte, a ordeno y mando, y eso de ordenar y mandar suena a poco democrático. O sea, que "Te vayas a tomar por culo" debe ser políticamente incorrecto, porque no sale en ningún diario: "Al señor Neira, la Espe lo ha mandado a tomar por culo".
ResponderEliminar¡Qué cosas!
jejejeje si, más bien si.
ResponderEliminarEstupendo artículo angie, que te sea leve.
Anda que estos tienen un arte para elegir bien las palabras que no veas.
ResponderEliminarO no es estar sembrao sacarse de la manga lo de "efebófilo"?
Como va a ser lo mismo que pedófilo.. si hasta parece que huele mal y tó, jajaja
Gracias y saluditos a todos.
ResponderEliminarQue ya se me acabó el recreo : (
La palabra "efebófilo" no se encuentra en el diccionario, que es una palabra que se inventaron los curas para hacer ver a los feligreses que un efebo, adolescente ateniense instruido en la efebia o servicio militar (dice la wikipedia) con apariencia femenina (pero con pilila) no es lo mismo que un paidos o niño.
ResponderEliminarLa cosa es que tanto el niño como el efebo tienen o recuerdan una apariencia femenina siendo varones, lo que les convierte, a los ojos de los pidófilos, en travestis. El travesti o el niño-adolescente son estímulos sexuales (hasta una cabra para el cabrero) pero en nuestra sociedad está fuertemente idealizada la infancia y fuertemente reprimida la relación sexual con menores, tan permitida en anteriores culturas occidentales.
De hecho, si a uno le dan a elegir entre una persona joven, casi adolescente, del sexo que sea, y un anciano, creo que las preferencias mayoritarias irían hacia el joven, no sin ciertas sorpresas.
Yo, entre un jovencito guapo, musculito, depilao y Sean Connery.. me quedo con el anciano :P
ResponderEliminarMi visión es más masculina que la tuya. Je, je, je.
ResponderEliminarEso espero.
ResponderEliminarEggselente articulo.
ResponderEliminarMuy acertado.
Por estasmontañas anda dando vueltas
una palabreja de reciente cuño. APUTAS(z)ARSE.
Creo que Sean no la usaría jamás.